Vistas de página en total

miércoles, 3 de diciembre de 2014

Écriture...

 Que corto es el amor y que largo el olvido, dijo un genio escritor y justo ahora siento que eso puedo comprender. Me encuentro en un punto de incertidumbre en el que tengo claridad, el verdadero problema es que esa claridad me está agobiando gracias a su inexplicable complejidad; por ende, a guisa del problema... debo  escribir; escribir para liberar a mi alma cansada, mostrarle a las penas el camino para huir y así recuperar esa fuerza que me da valor y sensibilidad.

Estoy sintiendo tanto que no estoy segura de como sentirlo. Jamás creí que tener esa capacidad de tener tanto y a la vez nada, si antes era una lluvia de verano... Ahora soy un huracán y juro por todo lo habido que necesito expresarlo o simplemente no podré hacer más; y aun tengo propósitos para cumplir. ¡Si!, esta rota y remendada muñeca de trapo aún siente.

He pensado tanto en como comenzar que empezaré por todo aquello negativo e infructífero para después obligarme a valorar lo bello de la vida... He estado muchos días meditando en lo que tengo y creo que al fin lo recordare, sin embargo, atribuyendo la razón a las matemáticas: El orden de los factores no altera el producto.

Tengo una especie de miedo que en vez de paralizarme, me esta haciendo actuar efectivamente. Cuando por lo general el miedo me detiene, me inmoviliza... Ahora no resulta el caso. Estoy siendo eficiente y sobre todo detallista mezclada con un perfeccionismo algo insano.

Me siento débil. Débil porque he decidido seguir otro camino y no al que estoy acostumbrada; y no estar en mi zona de confort produce debilidad e incertidumbre... Tal vez todos tengan razón y necesito descansar.


Tengo tedio, repulsión e ira, todos mezclados... Absolutamente todos. Tedio por que estoy harta y aburrida  del conformismo y la mediocridad. Repulsión porque la gente no suele tener honestidad y menos los que están muy por encima de mi y sobre todo ira, porque nadie esta dispuesto a luchar realmente contra el sistema, contra la impunidad: contra al desapego; y todo esto me produce asco... Me da asco esta situación. Ojalá y existieran mas personas como Luther King... Nos faltan tantos
soñadores luchones.

Siento el dolor que aparece cuando ha existido la pérdida de un ser amado... Me duele mi patria, mi nación, la gente que aquí vive. Me duele el conformismo y la dejadez. Pero también me duele saber que lo tengo pero no es mío... Estoy destinada a no ser feliz según el parámetro humano, por lo tanto aprenderé a acallar al dolor.

Siento nostalgia por las causas inconclusas mías y externas. Las mías buscare concluirlas, pero las externas me atormentaran... Debería dejar de sentir un poco y así la carga seria menos pesada, aunque mi conciencia se obseque por decir justo lo contrario.

Estoy decepcionada por el desinterés de muchos de los que esperaba más, estoy decepcionada porque se que aun puedo dar mas e intento convencerme de lo contrario. Estoy decepcionada por el desdén con el que ahora miro cosas que antes amaba con pasión...

La decepción me produce desapego, desapego por algunas personas. Personas que eran fundamentales, ahora no son mas que un bulto pesado del que me quiero deshacer... ¿Seré una desalmada? ¡Tal vez! Pero prefiero eso a fingir que aun hay fuego donde las cenizas ya han volado.

Siento desprecio... Desprecio hacia la gente que amé y me traiciono, y no solo eso... Todavía tienen el descaro de regresar. Siento desprecio hacia los cobardes impunes, hacia los tontos poderosos que solo su ego buscan alimentar. Siento desprecio hacia tantos que hasta pena y flojera me da mencionar... Los desprecio profundamente.

Tengo sed de venganza... Y no descansare hasta saciarla... Es tiempo de que haya justicia. Y todo esto mezclado me produce tristeza, porque siento que soy como un insecto volando contra corriente en alta mar embravecida. Sin embargo, no me importa porque aun tengo tiempo, fuerza y esperanza para luchar.

Lo que en realidad me preocupa no es toda esta negatividad sino que todo eso está comprimido y presionado por un amor extravagante, estimación, aprecio, devoción, pasión, orgullo, entusiasmo, determinación, cariño, respeto, admiración; mezclado con una sensación de pertenencia y ala vez desapego, sabiendo que no hay nada pero a la vez un todo... Todo esto hacia una sola persona que no busqué, simplemente por azares del destino apareció. Está empalagosa y masoquista mezcla que encanta... Simplemente la amo.

No importa que tan obscuro pueda ser el panorama, siempre hay un ínfimo motivo para sobrevivir y seguir luchando; pero sobre todo, para seguir luchando. Ahora puedo decir que he aprendido que no puedo exigir el amor de nadie. Yo solo puedo dar buenas razones para ser querida... Eso y dejar que la vida haga el resto; por lo tanto, debo poner esto en orden ya que tengo gente que amar y proteger.

martes, 28 de octubre de 2014

Retorno

He estado tan ocupada sin ocuparme en realidad, que no he realizado mi deber...
Tengo tanto que decir y callar que mi alma está más inquieta de lo normal y eso es un verdadero problema.

Mi corazón fue sellado, pero nunca asesinado... Por lo tanto, exige volver a sentir...
Exige aventuras, nuevas historias, antiguos recuerdos... En fin, un nuevo capítulo.

He decidido, por lo tanto, que no dejare de expresarme; que el egoísmo es un fracaso y la plenitud está en hacer feliz a los demás... He aprendido que hay muchas formas de amar y no todas son armas letales.

He aprendido a vivir el presente, enfrentar el futuro y aprender del pasado. He decidido ser fuerte otra vez.

Si... ¡Todavía soy fuerte!

Todavía tengo mucho que dar, mucho que hacer y tantos por quien vivir. Todavía hay sueños inconclusos, historias no empezadas y riesgos por sufrir... Todavía...

¡Si! Estoy completamente segura... ¡Todavía soy fuerte!

martes, 25 de febrero de 2014

Soile

Aún no entiendo como la vida dio vueltas y te puso frente a mi,
Tan perdidas y extraviadas que por accidente nos fuimos a hallar.

Busco en mi haber y siempre has estado ahí, oculta entre las sombras,
Amando con locura, callando la amargura.

Tu sonrisa encantadora ilumina mi largura, tu canto embelezado alumbra mi penumbra, y así me haces felíz...

Que bella es la vida a tu lado hermana mía, más que una sombra haz sido luz... Más que lo oculto, haz sido un sol.

No estás sola bella mía, porque a tu lado estoy, no estás desprotegida porque para eso vivo yo.

Te amo pequeñita, porque a donde quiera que yo vaya, se que siempre estarás a mi regreso.

lunes, 17 de febrero de 2014

¿Esperanza?

Han pasado varios días desde que escribi por última vez... Ha pasado tanto, tanto que ni aún yo misma me había percatado de ello. Mi vida es incierta.

Aún ahora no se que pensar, ni cómo obrar, mi destino es tan complicado que jamás, definitivamente jamás, hace lo que espero. Es algo así cómo un pequeño remolino que peca de intenso... Y debido a eso, vengo a abrumarlos con mi haber.

Justo creía yo, que jamás podría amar a nadie más, me propuse a hacerlo y me empeñe en lograrlo. Pero mi destino se ha burlado nuevamente de mi.

Se ha burlado tanto, que me ha puesto en una nueva y extraña situación... No sé que hacer... Los hombres de mi pasado insisten en regresar y reclamar lo que creen que por derecho les pertenece. Sin embargo esto ya no es así.

Tengo un hombre que no es mío y jamás lo será, se cree alguien tan grande y poderoso que de no ser así, viviría sumido en la depresión. Tengo a alguien que está tan lejos, que de ser posible doblaria el mundo entero para estar cerca de el.

Tengo un ser, que es tan pobre y desdichado que me parte el corazón, porque necesito estar a su lado para amarlo y procurarlo.

Tengo un ángel, que ha dejado de ser ángel para disfrutar de sus placeres carnales, sin embargo ni el sabe a donde quiere ir a parar. Tengo un hombre.

Querido ángel, querido hombre, querido amante de mis ilusiones... No quiero que te fijes en mi, ni que te quedes conmigo... Sólo te pido que seas feliz. No puedo verte más desdichado, ni contrariado porque no tengo fuerzas para poderlo soportar.

Hazme feliz a costa de tu dicha y no te olvides de mi. Mantengamos pues, la esperanza, de que algún día todo será mejor y podremos estar bien.